¿Cómo incluir pescado azul sin riesgo de mercurio?

El pescado azul, como las sardinas o la caballa, es rico en ácidos grasos omega-3, esenciales para el desarrollo cerebral de los niños. Sin embargo, algunos tipos pueden contener mercurio, un contaminante que podría afectar la salud si se consume en exceso. Como padres primerizos, es comprensible que busquen opciones seguras, y con pautas claras, pueden disfrutar de sus beneficios sin preocupaciones. Según la OMS y la AAP (American Academy of Pediatrics) en guías recientes, una dieta balanceada incluye pescado, pero con precauciones para los más pequeños.

Posibles razones del riesgo de mercurio

• El mercurio se acumula en peces depredadores grandes debido a la contaminación ambiental, según reportes de la OMS.
• Los niños absorben mercurio más fácilmente porque su sistema nervioso está en desarrollo.
• Consumir pescados con alto contenido de mercurio de forma frecuente puede aumentar la exposición.

Consejos para incluir pescado azul de forma segura

• Seleccione pescados bajos en mercurio: opte por opciones como sardinas, caballa o salmón, que suelen tener niveles reducidos.
• Limite la frecuencia: se recomienda generalmente 1-2 porciones por semana para niños, según pautas de la AAP.
• Prepare el pescado cocinándolo bien (asado o al horno) y sirva porciones pequeñas acordes a la edad del niño.

Conclusión

Incorporar pescado azul en la alimentación de su hijo puede ser nutritivo y beneficioso cuando se sigue con cuidado. Cada decisión que toman como padres refleja su amor y dedicación. ¡Sigan confiando en su instinto y celebrando los pequeños logros en este hermoso camino!

La información proporcionada en este artículo tiene únicamente fines informativos y no sustituye el diagnóstico o tratamiento médico profesional; si su hijo presenta cualquier problema de salud o señales de peligro mencionadas, consulte de inmediato a personal médico calificado.