¿Por qué seguir amamantando con fiebre?
Queridos padres, es natural preocuparse si se debe amamantar cuando la madre tiene fiebre. Muchos temen transmitir infecciones al bebé, pero en la mayoría de los casos, seguir con la lactancia es beneficioso. Según la OMS y la AAP (2020 en adelante), amamantar durante enfermedades leves suele ser seguro y recomendable, ya que fortalece el vínculo y aporta protección inmunológica. Siempre priorice su bienestar y consulte dudas.
Razones para continuar
- La leche materna contiene anticuerpos que ayudan a proteger al bebé contra infecciones comunes.
- Mantener la lactancia previene complicaciones como la mastitis y asegura un suministro adecuado de leche.
- El contacto cercano brinda consuelo y estabilidad emocional al bebé durante momentos de estrés.
Cuidados en casa
- Beba abundantes líquidos para mantenerse hidratada y apoyar la producción de leche.
- Descanse lo suficiente, delegando tareas domésticas para conservar energía.
- Lávese las manos con frecuencia y use una mascarilla si tose, para reducir riesgos de transmisión.
Cuándo buscar atención médica
Conclusión
La lactancia materna es un acto de amor y resiliencia. Ante la fiebre, seguir amamantando puede ser una decisión positiva para ambos. Confíe en su instinto, apóyese en su red de cuidados y celebre cada pequeño logro. ¡Ustedes son increíbles en este viaje de crianza!
Este artículo proporciona información con fines educativos únicamente y no sustituye el diagnóstico o tratamiento médico profesional. Si su hijo presenta algún problema de salud o señales de alerta mencionadas, consulte de inmediato a un profesional de la salud calificado.