Qué hacer si mi hijo sufre quemaduras solares en excursiones
Las quemaduras solares en niños durante excursiones son más comunes de lo que pensamos. Como padres, ver a nuestro pequeño con la piel enrojecida y dolorida puede generar preocupación. Esta guía ofrece medidas prácticas basadas en recomendaciones de la OMS y la AAP (2021), siempre desde el cariño y la comprensión hacia vuestra labor parental.
Posibles causas
- Exposición prolongada sin protección adecuada, especialmente entre las 10h y 16h
- Uso insuficiente de protectores solares (menos de FPS 30) o reaplicación inadecuada
- Reflejo de los rayos UV en superficies como agua o nieve que intensifican el daño
Cuidados en casa
- Retirar al niño del sol inmediatamente y aplicar compresas frías (no heladas) durante 10-15 minutos
- Hidratar la piel con lociones calmantes sin alcohol, preferiblemente con aloe vera o avena
- Ofrecer abundantes líquidos para prevenir la deshidratación y usar ropa holgada de tejidos naturales
- Administrar analgésicos pediátricos comunes si hay molestias, siguiendo siempre las instrucciones del envase
Cuándo buscar atención médica
- ⚠️ Si aparecen ampollas extensas o signos de infección (pus, aumento del enrojecimiento)
- ⚠️ Fiebre superior a 38°C, escalofríos o síntomas de deshidratación (llanto sin lágrimas, menos micciones)
- ⚠️ Dolor intenso que no mejora tras 48 horas con cuidados básicos
Conclusión
Las quemaduras solares suelen mejorar en pocos días con cuidados suaves. Recordad que cada experiencia al aire libre es una oportunidad de aprendizaje. Como padres, ya estáis haciendo un trabajo extraordinario al informaros. La próxima excursión, con protector solar y gorra, será aún más disfrutable para toda la familia.
La información proporcionada en este artículo tiene fines educativos y no sustituye el consejo médico profesional. Ante cualquier síntoma grave o persistente, consulta inmediatamente con un especialista en salud infantil.