¿Qué hacer si el bebé tiene regurgitación con flema?

La regurgitación con flema en bebés es un fenómeno frecuente que puede generar preocupación en padres primerizos. En la mayoría de los casos, se debe a la inmadurez natural del sistema digestivo y no representa un riesgo grave. Como experto en crianza, comprendo sus inquietudes y les aseguro que, con paciencia y observación, podrán apoyar a su pequeño con confianza y amor. Esta guía se basa en recomendaciones de organizaciones como la OMS y la AAP (American Academy of Pediatrics) a partir de 2020, siempre priorizando el bienestar de su bebé.

Posibles causas

Consejos de cuidado en casa

Cuándo buscar atención médica

  • ⚠️ Si el bebé presenta vómitos persistentes o con fuerza, especialmente si contienen sangre o bilis.
  • ⚠️ Si hay dificultad para respirar, sibilancias o cambios en el color de la piel, como palidez o azulado.
  • ⚠️ Si se observa fiebre, signos de deshidratación (por ejemplo, menos de 6 pañales mojados en 24 horas), o el bebé rechaza la alimentación.

Si aparecen estos signos, consulte inmediatamente a un profesional médico.

Conclusión

La regurgitación con flema suele ser temporal y mejora a medida que el bebé crece, gracias al desarrollo de su sistema digestivo. Recuerden, padres valientes, que cada pequeña acción que toman demuestra su dedicación y cariño. No duden en celebrar los avances y buscar apoyo cuando lo necesiten; están construyendo un vínculo maravilloso que perdurará para siempre. ¡Sigan adelante con optimismo!


La información en este artículo es solo para referencia y no sustituye el diagnóstico o tratamiento médico profesional; si su hijo presenta algún problema de salud o señales de peligro mencionadas, consulte inmediatamente a un profesional médico calificado.