¿Por qué evitar el sueño con biberón para prevenir caries del lactante?
Queridos padres, como cuidadores comprometidos, es natural que busquen el máximo bienestar para su bebé. Un hábito común pero riesgoso es permitir que el pequeño se duerma con el biberón en la boca. Aunque parece inofensivo, esta práctica puede dañar los primeros dientecitos. La Asociación Americana de Pediatría (AAP, 2022) y la OMS destacan su relación con la caries de la primera infancia. Comprender los porqués nos ayuda a crear rutinas más saludables.
Posibles causas de caries por biberón nocturno
- Exposición prolongada a azúcares: La leche (incluso materna) o fórmulas contienen azúcares naturales que, al estancarse en la boca durante horas, alimentan bacterias productoras de ácidos que erosionan el esmalte dental.
- Reducción del flujo salival: Durante el sueño, la producción de saliva disminuye, lo que limita su acción protectora y de limpieza natural contra los ácidos dañinos.
- Contacto directo con dientes: El chupeteo constante mantiene el líquido en contacto con las encías y dientes emergentes, especialmente los frontales superiores, que suelen afectarse primero.
Consejos prácticos para prevenir
- Desvincular alimentación y sueño: Termine las tomas 15-20 minutos antes de acostar al bebé, limpiando suavemente encías y dientes con una gasa húmeda o dedal de silicona.
- Transición gradual: Si el bebé necesita el biberón para dormir, sustituya progresivamente la leche por agua limpia según recomienda la AAP.
- Cuidado dental temprano: Al aparecer el primer diente, inicie el cepillado con un cepillo infantil suave y pasta dental con flúor (tamaño de un grano de arroz), dos veces al día.
- Establecer rutinas reconfortantes: Introduzca alternativas como nanas, masajes o un peluche de seguridad para asociar el sueño con estímulos no alimentarios.
¿Cuándo consultar al odontopediatra?
- ⚠️ Si observa manchas blancas, marrones o puntos negros en los dientes
- ⚠️ Cuando note inflamación de encías, rechazo al comer o llanto al morder
- ⚠️ Ante mal olor bucal persistente o cambios en la forma dental
Conclusión
Proteger la sonrisa de su bebé comienza con pequeños gestos cotidianos. Modificar el hábito del biberón nocturno requiere paciencia, pero previene dolorosas complicaciones dentales. Cada esfuerzo que hacen refleja el profundo amor que sienten por su pequeño. ¡Confíen en su instinto y celebren cada avance! Recuerden que las revisiones dentales periódicas desde el primer año son aliadas clave para una boca sana.
Este artículo ofrece información general, no reemplaza el diagnóstico o tratamiento médico profesional. Si su hijo presenta síntomas mencionados o preocupaciones de salud, contacte inmediatamente a un personal sanitario cualificado.