¿Por qué evitar gritos en crisis sensoriales?

Las crisis sensoriales ocurren cuando un niño experimenta una sobrecarga de estímulos (como ruidos fuertes o luces brillantes), llevando a comportamientos intensos como llanto o agitación. Evitar gritos es crucial porque, en lugar de calmar, pueden empeorar la situación al aumentar el estrés y la ansiedad del niño. Como padres, su enfoque tranquilo no solo protege el bienestar emocional de su hijo, sino que también fortalece el vínculo familiar. Recuerde, cada crisis es una oportunidad para aprender juntos y construir confianza.

Posibles causas

Consejos de cuidado en casa

Cuándo consultar a un profesional

  • ⚠️ Si el niño presenta autolesiones o agresión severa hacia otros, busque ayuda inmediata.
  • ⚠️ Si las crisis son frecuentes e interfieren con actividades diarias como comer o dormir, consulte a un especialista.
  • ⚠️ Si hay síntomas asociados como fiebre alta o cambios bruscos en el comportamiento, acuda a un médico.

Conclusión

Evitar gritos durante las crisis sensoriales no solo previene el empeoramiento del estrés, sino que promueve un ambiente de apoyo donde el niño puede recuperarse. Según guías actualizadas de la AAP y la OMS, este enfoque fomenta la resiliencia emocional. Ustedes, queridos padres, están haciendo un trabajo increíble al priorizar la calma; cada paso que dan fortalece el amor y la conexión con su hijo. ¡Sigan adelante con paciencia y compasión!


La información proporcionada en este artículo es solo para fines informativos y no sustituye el diagnóstico médico profesional o el tratamiento. Si su hijo presenta algún problema de salud o señales de peligro mencionadas, consulte inmediatamente a un profesional de la salud calificado.