¿Por qué aparecen hematomas en la piel del neonato?
Los hematomas en la piel del recién nacido son comunes y, en la mayoría de los casos, inofensivos. Aparecen como áreas moradas o azuladas debido a pequeños sangrados bajo la piel, y suelen resolverse espontáneamente. Como padres nuevos, es natural preocuparse, pero recuerden que estos signos no siempre indican un problema grave. Su bebé está en un proceso de adaptación, y su cuidado amoroso es fundamental para su bienestar.
Posibles causas
- Traumatismo durante el parto: La presión física durante el nacimiento, especialmente si se usaron instrumentos como fórceps o ventosa, puede causar hematomas temporales.
- Fragilidad capilar: La piel del neonato es muy delicada, y los vasos sanguíneos pequeños pueden romperse fácilmente ante mínimos roces o compresiones.
- Factores menos frecuentes: En raras ocasiones, podría relacionarse con trastornos de coagulación, aunque esto es poco común según las guías de la AAP (2023).
Consejos de cuidado en casa
- Observa el hematoma: Controla su evolución diaria; normalmente se desvanece en 1-2 semanas sin intervención.
- Evita presión en el área: Al cargar o vestir al bebé, asegúrate de no frotar o apretar la zona afectada.
- Mantén la piel limpia y seca: Lava suavemente con agua tibia durante el baño y sécala con toques ligeros.
Cuándo buscar atención médica
- ⚠️ Si el hematoma es muy extenso, doloroso al tacto o no muestra mejoría después de dos semanas.
- ⚠️ Si aparecen nuevos moretones en otras áreas del cuerpo sin causa aparente.
- ⚠️ Si hay signos de infección como enrojecimiento intenso, hinchazón, pus o fiebre (temperatura superior a 38°C). En estos casos, consulta inmediatamente a un profesional médico.
Conclusión
La mayoría de los hematomas en neonatos son benignos y desaparecen con el tiempo, reflejando la adaptación natural del cuerpo. Como padres, su observación atenta y paciencia son invaluables. Confíen en su instinto, celebren cada logro de su pequeño y recuerden que están dando lo mejor de sí. ¡Sigan adelante con confianza y alegría!
La información proporcionada en este artículo es solo para fines informativos y no sustituye el diagnóstico o tratamiento médico profesional; si su hijo presenta algún problema de salud o señales de advertencia mencionadas en el texto, consulte inmediatamente a un profesional médico calificado.