¿Por qué duele el útero durante la lactancia?
Queridas mamás, sentir molestias uterinas durante la lactancia es una experiencia común que suele generar preocupación. Estas sensaciones, aunque incómodas, frecuentemente forman parte del proceso natural de recuperación posparto. Comprender por qué ocurren puede brindar tranquilidad durante esta etapa de conexión con tu bebé.
Posibles causas
- Contracciones uterinas naturales: La succión del bebé estimula la liberación de oxitocina, hormona que provoca contracciones para ayudar al útero a volver a su tamaño original.
- Proceso de involución uterina: Durante las primeras semanas posparto, el útero reduce su peso de aproximadamente 1 kg a 100 gramos, lo que puede causar calambres similares a los menstruales.
- Sensibilidad posparto: Los tejidos uterinos permanecen más sensibles tras el parto, especialmente después de cesáreas o partos complicados.
Cuidados en casa
- Realiza respiraciones profundas durante las tomas para relajar la musculatura abdominal
- Aplica calor suave en el bajo vientre con una bolsa de agua tibia (nunca caliente) durante 10-15 minutos
- Mantén una postura cómoda durante la lactancia usando cojines de apoyo
- Descansa cuando el bebé duerma para permitir la recuperación corporal
Cuándo buscar atención médica
- ⚠️ Fiebre superior a 38°C acompañada de escalofríos
- ⚠️ Dolor intenso que no mejora después de 7-10 días posparto
- ⚠️ Sangrado vaginal abundante (empapando más de una toalla sanitaria por hora) o con mal olor
- ⚠️ Enrojecimiento, hinchazón o secreción anormal en la zona de cesárea
Palabras finales
Estas molestias, conocidas como "entuertos", suelen disminuir notablemente durante las primeras dos semanas. Recuerda que cada cuerpo tiene su ritmo de recuperación y estas sensaciones son testimonio del increíble trabajo que realiza tu organismo. Celebra cada toma como un acto de amor y cuidado mutuo. ¡Estás haciendo un trabajo extraordinario!
Este artículo proporciona información de carácter general que no sustituye el diagnóstico o tratamiento médico profesional; si tu bebé presenta problemas de salud o alguna señal de alerta mencionada, consulta inmediatamente con personal sanitario cualificado.