Por qué mi recién nacido tiene ictericia que empeora por la noche
Queridos padres primerizos, ver a vuestro bebé con ictericia (coloración amarillenta en piel y ojos) puede generar preocupación, especialmente cuando parece intensificarse al caer la tarde. Esta condición es frecuente en recién nacidos, ya que sus hígados aún se adaptan a procesar la bilirrubina. Según la OMS y la AAP (2021), hasta el 60% de los neonatos presentan ictericia fisiológica, que suele resolverse en 1-2 semanas. El aumento nocturno no siempre indica gravedad, pero entender sus causas os ayudará a actuar con tranquilidad.
Posibles causas
- Variaciones naturales en los niveles de bilirrubina: Los ciclos circadianos hacen que la bilirrubina alcance su punto máximo entre la tarde y la noche, como parte del proceso metabólico normal.
- Menor actividad intestinal nocturna: Durante el sueño, la motilidad intestinal disminuye, reduciendo la eliminación de bilirrubina a través de las heces.
- Percepción visual alterada: La luz artificial tenue de la noche puede hacer que el tono amarillo se aprecie más intensamente que con luz natural diurna.
Cuidados en casa
- Mantened una alimentación frecuente (leche materna o fórmula), idealmente cada 2-3 horas incluso de noche, ya que la hidratación favorece la eliminación de bilirrubina.
- Realizad observaciones diurnas con luz natural: Examinad al bebé cerca de una ventana para valorar mejor el color de piel y escleróticas.
- En casos leves, podéis practicar "baños de sol" seguros temprano en la mañana (5-10 minutos con exposición indirecta, nunca directa o en horas fuertes), siempre supervisando que el bebé no se enfríe o sobrecaliente.
Cuándo consultar al pediatra
- ⚠️ Si la ictericia se extiende a brazos, piernas o abdomen.
- ⚠️ Si el bebé muestra rechazo al alimento, letargo extremo o llanto débil.
- ⚠️ Fiebre superior a 38°C, vómitos persistentes o heces blancas/descoloridas.
Palabras finales
La ictericia nocturna, aunque inquietante, suele ser parte del ajuste natural de vuestro pequeño al mundo exterior. Confiad en vuestra observación amorosa y recordad que cada cambio que notáis refleja vuestra dedicación. Como padres, ya estáis haciendo algo extraordinario: acompañar con ternura cada paso de este viaje. Pronto veréis cómo ese tono dorado da paso a sonrisas radiantes.
Este artículo proporciona información general que no sustituye el diagnóstico o tratamiento médico profesional. Si su bebé presenta síntomas preocupantes o señales de alerta mencionadas, contacte inmediatamente con un profesional de la salud cualificado.